Teru Crying

Llore con el video, se me rompio el corazón ver a Teru lindo así ;///;  aww se emociono tanto precioso u/w/u

Ai nante (Yamapi x Tegoshi)

Este es muy antiguo del 2008...  o-o Oneshot del grupo NewS... un Yamapi x Tegoshi y sí... escribia más pesimo que ahora xD

Era una tarde nublada y fría un hermoso joven japonés de 16 años se encontraba deambulando por las desiertas calles de Japón, este joven era Yuya Tegoshi, pero para los amigos era simplemente Tego o Tegoshi.

　

Aquel joven hacia poco había tenido la lamentable perdida de sus padres adoptivos a los únicos seres que tenía en la Tierra. Ahora este hermoso muchacho se encontraba solo y desamparado.

　

Pero por las casualidades de la vida conoce a un sexy joven llamado Yamashita Tomohisa pero como a el no le gustaba mucho su nombre le gustaba que le dijeran Yamapi, este chico era muy simpático, con el tiempo se hicieron los mejores amigos.

　

Un día Tegoshi le comenta a su amigo Yamapi que ya no soportaba la soledad que se esparcía por su casa y que no quería seguir viviendo, Yamapi al escuchar eso se enojo terriblemente y por eso le tomo la decisión de invitarlo a vivir con el, por miedo que Tegoshi cometería ninguna locura. Tegoshi no muy convencido acepto la propuesta de su amigo.

　

Al tiempo de vivir juntos los sentimientos de los dos cambiaron, cuando se veían sentían aquellas maripositas en el estomago, cuando sus cuerpos se tocaban sentían un gran deseo de seguir tocándose… eso ya no era muy normal para ellos, hasta que un día no pudiendo resistir más la tentación sucedió lo inevitable los dos terminaron en la cama en una danza erótica, fundiendo sus cuerpos en uno solo.

　

Después de aquel encuentro los dos chicos estaban decididos y comenzaron una relación todo iba perfecto hasta que Tegoshi sentía a su pareja estaba en conductas un poco raras ya que salía todas las noches y eso no era muy normal así que no pudiendo resistir su curiosidad un día lo siguió, todo iba bien pero cuando llegó a su destino Tegoshi se quedo impresionado al ver que Yamapi su Yamapi era un vampiro…

　

Eso nunca se lo espero, pero lo único que se le ocurrió hacer fue llegar a su lado, abrazarlo con todas sus fuerzas demostrándole así todo lo que significaba para el. Pero por otro lado Yamapi no podía creer que Tego supiera su secreto que oculto celosamente por tanto tiempo tenía que explicarle antes de que lo perdiera para siempre…

　

- Tego, yo perdóname, yo… - intentaba explicar Yamapi pero fue detenido al posarse un dedo sobre su boca.

　

- No hables más – dice Tego mirándolo a los ojos – te perdono.

　

- Gracias pero, tienes que alejarte de mi Tego – decía con un tono triste en su voz.

　

- Eso nunca, yo te amo, no me importa que seas un vampiro, nada cambiara entre nosotros.

　

- ¿Estas seguro?, ¿Piensas seguir viviendo con un vampiro que en cualquier momento te pueda hacer daño?.

　

- Si, no me importa eso, solamente quiero estar al lado tuyo.

　

- No Tego yo no lo soportaría… será mejor que me aleje de ti para siempre – con la voz un poco quebrada.

　

- NOOOOOOO, por favor no, no te alejes de mi, si te alejas de mi me quedare solo… eres lo único que tengo – sollozando- ¡LO UNICO!... ¿lo entiendes?.

　

- Si lo entiendo pero…

　

- Entonces quiero ser como tú, así no me podrás hacer daño y estaré contigo para siempre – dijo Tegoshi determinadamente.

　

- ¡Que estas diciendo Tego! Eso ¡nunca! ¿me escuchaste? ¡NUNCA!, no sabes lo difícil que es ser vampiro, les haces daño a las personas… tu corazón es muy puro para ser así – decía Yamapi intentando hacer razonar a su amante.

　

- Escúchame, eres todo para mí, ¡TODO! No quiero separarme de ti…

　

Yamapi al escuchar como su amante le pedía con todo fervor ser como el, acepto irremediablemente…

　

Aquella noche fue la que marco la vida de dos seres que se amaban profundamente.

　

Se prometieron estar juntos que nada ni nadie los separaría nunca.

Yamapi casi no durmió aquella noche ya que toda su atención estaba en su amante el cual dormía en su pecho, el estaba preocupado pensando en el riesgo que había expuesto a su Tegoshi ya que no era tan solo que lo convirtiera en un vampiro si no que eran muchas cosas más. Pero el se prometió cuidarlo a cualquier costa y no dejarlo jamás en toda su existencia.

Memories (Kamijo x Jasmine You)

Este fanfic lo cree para el primer aniversario de la muerte de Jasmine You el año pasado...

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Era de mañana una hora demasiado temprana para que alguien estuviera en el cementerio pero él estaba ahí en el suelo, de rodillas, frente a una tumba muy hermosa con unos lentes de sol para ocultar las lágrimas que bajaban de sus ojos. Observaba la lápida destrozado, no podía creer que ya había pasado tanto tiempo, exactamente un año desde su partida, la del ser que más amaba y no podía superarlo aún pues sentía como si tan solo hubieran pasado unas horas, como si acabara de despertar de una horrible pesadilla. Estiró una de sus manos y tocó con delicadeza una de las rosas moradas tan hermosas como el ser que reposaba allí, suspiro y subió su mirada hacia el cielo.

-¿Por qué? ¿Por qué te lo llevaste?– murmuró con su voz quebrada sin dejar de mirar hacia arriba -¿Por me lo arrebataste en el mejor momento de nuestras vida?– siguió preguntando como si pudiera

recibir alguna respuesta.

Suspiró de nueva cuenta cerrando sus ojos, dejando la fría brisa acariciara su rostro, se perdió en sus pensamientos, más bien en recuerdos que se remontaban hasta aquella época en la que se conocieron, en la que compartieron tanto.

- Aquella vez que te vi por primera vez, tu fino y elegante semblante, la manera en la que te movías ni hablar de tu magnifica manera de tocar, fue demasiado cautivante, tan deslumbrante –susurró a la nada sintiéndose transportar a ese bello y hermoso día.

~

Había decidido ir a visitar a Hizaki ya que no le veía desde hacia tiempo aunque sabía se encontraría ensayando con los miembros de su proyecto así que fue al lugar donde estarían, cuando llegó al único que vio fue a él que estaba ensayando con su bajo, estaba tan hermoso, se acercó a él y le preguntó dónde podría ver a Hizaki, respondió con su suave voz que estaba en una junta y que si quería podía esperarlo aquí así que encantado aceptó sentándose en unos de los sillones, admirando al bajista embelesado, este se dio cuenta y sonrió dejando su bajo a un lado y acercándose a él.

- Soy Jasmine You un placer –le miró algo impresionado al ver cómo se presentaba observando su delicada mano que se hallaba extendida ante su cara esperando ser tomada.

- Un placer, soy Kamijo Yuuji –contestó el rubio estrechándole la mano por unos segundos en los cuales se perdí aquellos bellos ojos, podía haberse quedado así durante el resto de su vida si no hubiera sido porque en esos instante llego Hizaki quien al verlo le saludó de inmediato, pero antes de que se separan pudo ver la bella sonrisa de aquel precioso bajista.

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- Todo de ti me atrajo enseguida -llevó una mano a su pecho a la vez que abría sus ojos regresando a su dolorosa realidad, tocó de nuevo con sus largos dedos la lápida por sobre las letras donde decía su nombre- de ahí seguí contactándote hasta que con Hizaki decidimos hacer Versailles y sin dudar le dije que te escogiera como bajista de ese nuevo proyecto ¿te acuerdas? –susurró como si aún estuviera frente a él escuchándole, de repente un recuerdo el más hermoso de todos vino… su primer beso, el día en el que se declararon y fueron uno solo en cuerpo y alma- como olvidarlo…

~

Estaban ensayando cuando a Kamijo le llamo el manager para se reuniera con el así que les dijo a los demás que guardaran sus instrumentos y que cuando volviera les informaría. La reunión duró varias horas cuyo objeto era informarles de la siguiente gira. Al termino fue rápidamente a donde estaban ensayando antes y pudo apreciar que todos estaban conversando, todos menos él porque sorprendentemente se había quedado dormido en el sillón, dioses se veía tan adorable así, Yuuji se acercó a Hizaki, Teru e Yuki para hablarles sobre la gira después les dijo que podían irse porque el ensayo había que dado hasta ahí, los vio tomar sus cosas y marcharse para sus hogares no sin antes escuchar la voz de Hime-chan que le decía que cuidara de Jasmine, pero eso no tenía que decirlo pues lo haría de igual forma, aunque le respondió afirmativamente y al ver como se iba se acercó al durmiente.

-Hermoso –susurró acariciándole la mejilla con suavidad mientras sin querer se iba acercando a su rostro, quería probar aquellos hermoso labios, cuando iba cumplir su deseo pudo ver como los ojos castaños se abrían y le mirabas algo impresionado por la cercanía.

-K…Kamijo… -la voz sonó adormilada mientras el aludido se separaba antes de hacer una locura, Jasmine se sentó en el sillón mirándole con calidez -Kamijo ¿Qué ibas hacer?– preguntó pero él se quedó en silencio, no sabía que contestar, entonces se levantó mirando en rededor -Parece que todos se fueron, si es así también debería, adiós Kami– así que comenzó a caminar lentamente hacia donde estaba su bajo para recogerlo e irse, pero Kamijo no quería que se fueras así que lo siguió y lo abrazó por la espalda apoyando su mentó en el hombro delicado.

-No te vayas, por favor–lo estrechó más fuerte contra sí- Jas… te quiero –susurró en su oído, armándose de valor y sintiendo de inmediato como aquel delicado cuerpo se estremecía.

-Kami-chan yo–sentía el nerviosismo del hermoso músico ¿Qué pasaba? No sabía, solo podía notar su cuerpo tenso- yo… hay algo que debo decirte tu, me gustas mucho –le soltó impresionado por sus palabras ¿enserio le estaba diciendo eso? No podía creerlo- Te amo Kami-chan…

-Jas también te amo desde la primera vez que te vi me enamore perdidamente de ti –le confesó volviéndolo abrazar pero estaba vez haciendo que su mirada se volviera hacia él, pasó los brazos por la esbelta cintura observando que su rostro se había puesto algo rojo, sonrió y acercó sus labios a los carnosos que estaban ante él depositando un suave beso siendo feliz al notar cómo le correspondía.

El beso duro apenas unos segundos pero fueron lo suficiente para transmitir todo lo que sentían, se miraba muy tierno así… Entonces Kamijo pudo ver como entrelazaba sus brazos alrededor de su cuello acercándose para darle un beso algo más apasionado que correspondió con igual sentimiento hasta que comenzó a acariciar su delicada espalda, quería sentirle por completo. Sus caricias no le fueron indiferentes a Jasmine que también empezó a tocarle. Entre besos y caricias se dirigieron al sillón en el que el bajista había dormido con anterioridad y este fue recostado allí, Yuuji se separó de sus labios para comenzar a besar su delicioso cuello, después bajó las manos por todo aquel delicado cuerpo deslizando tocando la suave piel por debajo de la ropa, pero sin dejar de mirar el rostro el ruborizado, aunque eso solo le hacía ver más adorable y perfecto, a continuación sacó la parte superior de su ropa dejando su pálido torso al descubierto, depositando pequeños besos en el, luego retiró el resto de la ropa que quedaba sintiendo como una de sus manos se posaba en su cabeza intentando alejarlo, así que lo miró un poco extrañado.

- ¿Sucede algo? –preguntó preocupado, pero Jasmine negó con la cabeza suspirando, atrayéndole después hacia él.

- Kamijo… tú también quítate la ropa, no se vale que solamente yo me muestre ante ti –dijo con una sonrisa en sus labios, después de esa petición el aludido se sacó la ropa quedando en iguales condiciones.

Todo después paso tan rápido las caricias se hicieron más osadas, los besos más apasionados podían escuchar gemidos de placer del otro, las suplicas para que entrara en él, los gemidos en ávidos de movimiento y en los que se pedían más, todo era perfecto y aún más cuando después de varios minutos terminaros en un sonoro gemido de placer, Kamijo observó su rostro, que estaba sudoroso y sonrojado pero con una bella sonrisa de felicidad en el, habían sido uno.

~

- Esa noche fue la mejor de todas, te pedí que fueras mi pareja cuando terminamos de hacer el amor y tu aceptaste haciéndome el hombre más feliz de todos –sus cabellos se mecieron por la brisa que había en esos momentos- después de eso pasamos buenos momentos éramos tan felices no debieron separarnos –dijo tomando una de las rosas moradas con cuidado besándola como si se tratara de sus labios, cerró los ojos tratando de alejar los demás recuerdos de aquel día que quería olvidar, sacudió rápidamente su cabeza, no quería recordarlo, no quería sufrir más.

No quería recordar cómo su amado sufría por la enfermedad, cómo lo veía esos días en los que ya no podía ir a los ensayos, estaba tan frágil que no podía ni moverse ¿Cómo iba a querer recordar esos días? Los días que serian los últimos de su hermosa rosa, suspiró y dejo la flor en donde estaba, metió una de sus manos en el bolsillo derecho de su saco sacando una pequeña cajita la cual abrió dejando a relucir un hermoso anillo que tenía sus iníciales.

- ¿Sabes Jas? Esto te lo iba a entregar aquel día en que te vi partir con tu familia para ir a ver el cielo en Yokohama, quería entregártelo pero no pude, al día siguiente te fui a ver y tú estabas sentado mirando por la ventana de tu casa –suspiró tomando con un poco más de fuerza la cajita - Me acerque a ti y te abrace, tú, aun estando agotado me sonreíste bellamente haciéndome feliz –llevó una de sus manos cerca de su corazón contemplando la lápida- no podía creer que ese sería nuestro ultimo día juntos, no quería hacerlo –susurró débilmente sacando el anillo de la caja dejándolo ahí- para ti mi hermoso You… te amo.

Se saco los lentes y se levanto de ahí secándose las lagrimas que en ningún momento dejaron de fluir, una pequeña sonrisa apareció en sus labios al contemplar por última vez la tumba comenzando a caminar de vuelta a su casa, debía de superarlo, aunque estaba claro que nunca le olvidaría, pero no podía estarse llorando todo el tiempo, tal vez con esa actitud ponía triste a su amado allá arriba, se volvió a colocar sus lentes caminando tranquilamente, en el camino pudo apreciar que venía Hizaki que le saludo y el con un simple hola siguió su camino, debía de continuar, a su mente vino aquella estrofa de Serenade y sonrió.

“Éramos capaces de atravesar el muro,

Por alto que fuera,

Y así llegamos a este lugar.

Gracias, ahora puedes dormir

Porque ya puedo caminar solo...”

Hasta pronto mi hermoso ángel…